domingo, 7 de julio de 2013

El Hombre de Acero: Acción exagerada y desmedida.

El Hombre de acero, dirigida por Zack Snyder (300, Watchmen, Suckerpunch) y escrita entre otros por Cristopher Nolan, ha causado expectación gracias a dos factores: la explotación del género fan y una correcta promoción. Teasers cortos  que presagiaban una película distinta, más humana quizás.

Sin embargo, es más de lo mismo. Una película de superhéroes, grandes y espectaculares despliegues de efectos especiales y una acción a veces desmedida. Aunque hay pinceladas que intentan hacer de esta película algo distinta, como esos primeros planos costumbristas y naturales como un cubo  llenándose del agua de la lluvia o la ropa tendida ondeando al viento recortada contra los paisajes de Kansas (planos preciosos por cierto) el filme se reduce a una continua batalla épica entre Kal-El (nuestro superman) y el villano Zod y sus lugartenientes.

Sin duda es una enorme y costosa producción que ha suscitado tanto alabanzas como críticas, creo que más de lo segundo. Y tampoco es de extrañar. No hay nada en el montaje de la película que nos haga partícipes de las vidas de Clark Kent y Lois Lane, no hay ni un solo banderín de enganche para empatizar con los protagonistas, todo parece ir a saltos, un montaje descuidado aunque directo en un película de casi dos horas y media.


Por volver a ponerle notas a las películas, algo hartamente subjetivo, le doy un cinco sobre diez.
Comparte esto con el mundo:

No hay comentarios: