jueves, 6 de septiembre de 2012

Imperium. Poder de Vida y Muerte.



La secuela de Antena 3,  Imperium: Poder de Vida y Muerte se emitió ayer con un primer capítulo flojo con una estructura débil que fluía única y exclusivamente gracias a la casualidad, no a ardides de la trama.

Decir de Imperium que lo primero que tuvieron que hacer era haber elegido otro nombre, a alguno seguramente se le haya pasado por la cabeza, que era la adaptación de una saga de videojuegos de estrategia con el mismo nombre que, precisamente, trata de las conquistas romanas.

Segundo, sobra el segundo título, Poder de Vida y Muerte. Creo que es hora de adoptar las formas estadounidenses de hacer producciones televisivas de una vez por todas. No se si es Bambú producciones o la propia Antena 3 quien exige esos títulos largos y pomposos, pero ¿no es mejor ser escueto, directo? En todo caso, habría sido mejor dejarlo en un corto y sencillo IMPERIUM.

Tercero, no se puede construir un piloto con un guión cuya estructura esté abandonada a la sucesión de casualidades. Eso hace que uno se desvincule de la serie. Imperium tiene muchas posibilidades que se pueden cargar con guiones flojos.

Voy a dejar de numerar, porque parece que sólo veo errores y no es así. 


Me gusta que en Imperium hayan sido un poco cuidadosos y no hayan incluído actores con ciertos acentos (o que los hayan doblado, no lo sé). Recuerdo aún en los primeros capítulos de la serie Hispania, como un numantino hablaba 
con un modernísimo acento andaluz (con todos mis respetos) que rompía la fantasía creada.

Y también me gusta que los productores de Bambú hayan sido inteligentes y hayan alquilado los estudios de Cinne Cité, donde la HBO dejó sue huella en los espectaculares escenarios para la carísima serie Roma (ver el calendario hecho para la serie de HBO en una de las primeras tomas es, creo yo, un guiño a la superproducción). Una forma quizás de ahorrar, para no meterse en la costosa tarea de tener que construir unos nuevos, y también de darle caché.


Destacar la actuación de Lluis Homar y Pepe Sancho, dos pesos pesados de la actuación en nuestro país, que consiguen darle con facilidad a la serie, una atmósfera de traiciones palaciegas que sin duda es lo mejor de todo el piloto.


Tampoco vamos a desdeñar la falta de mojigatería de la producción. Sin temor a represalias, en Imperium no dudan en "enseñar carne" cuando el guión lo permite, si bien no es tan exagerado como en otras producciones "romanas" como Espartacus, donde prácticamente sólo hay eso.

Así que démosle a Imperium el beneficio de la duda. Esperemos al próximo miñercoles para ver como avanza.
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