Además, sin temor a equivocarme, Juego de Tronos es la adaptación audiovisual que mejor ha administrado la innmensa cantidad de su versión literaria. Quizás haya puristas que echen de menos tal o cual pasaje del libro, pero hay que tener claro que Juego de Tronos es una superproducción, algo muy costoso, y ese alto coste, por poner un ejemplo, fue lo que acabó con las aspiraciones de Roma, otra producción de la HBO, de tener una tercera temporada.
Para quien no le guste la fantasía épica, o viva en una cueva y no haya oído nunca hablar de la saga “Canción de Hielo y Fuego”, aquí va una muestra de la promo del último capítulo de la segunda temporada.
Juego de Tronos pone ante nuestros ojos el ocaso de un reino, las conspiraciones palaciegas hechas entre las sombras, los ecos de una guerra cruenta y el resurgir de una magia olvidada.
Como suelo decir, no creo que haya producto de HBO, al menos de los más actuales, que haya salido malo. Una mezcla de talento, buena planificación y respeto por el espectador es lo que hace de Juego de Tronos serie de culto antes de tiempo.
Los fans de la fantasía épica creo que hemos disfrutado de lo lindo con esta serie, esperar casi todo un año a la tercera temporada, que cubrirá el segundo volumen del segundo libro de Canción de Hielo y Fuego, va a ser muy duro.
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